1 taza de chirimoyas, peladas, sin pepas y licuadas o procesadas como puré
1 cucharadita de vainilla
2 claras
½ taza de Oporto
1 ½ taza de azúcar (para la miel)
Canela en polvo
1 cucharadita de extracto de vainilla
Preparación:
Batir las yemas hasta que estén cremosas y de color amarillo claro. Reservar.
Colocar la leche condensada con el azúcar en una olla mediana y llevar al fuego moviendo constantemente hasta que espese como manjarblanco suave. Retirar del fuego y agregar las yemas al hilo mientras se mueve rápidamente. Regresar 2 minutos al fuego, moviendo, cuidando que no vaya a hervir. Retirar del fuego y agregar el puré de chirimoya y la vainilla. Verter en una dulcera de poca profundidad o en copas individuales.
Colocar el azúcar (para la miel) en una olla con el oporto. Llevar a hervir hasta que el almíbar llegue a punto de bola blanda o 220°F (110°C) en el termómetro. Para saber si el almíbar está a punto y no se tiene un termómetro, echar 1 cucharadita del almíbar en un vaso con agua helada. El almíbar se irá al fondo del vaso. Introducir los dedos índice y pulgar y tomar el almíbar. Este se puede moldear con los dedos.
Mientas el almíbar se está haciendo, batir las claras a punto de nieve. Gradualmente, y sin dejar de batir, verter este almíbar a las claras en forma de hilo. Continuar batiendo hasta que el merengue enfríe y se ponga duro. Con la ayuda de una cuchara y tenedor, colocar el merengue en copos cubriendo la crema de lúcuma.
Espolvorear canela en polvo encima del merengue.