1 ½ - 2 cucharadas de jugo de limón, aproximadamente
Pizca de pimienta blanca
1 cucharada de agua
1 taza de mantequilla derretida
1 cucharadita de sal
Preparación:
Colocar agua (1 ½ taza) en la parte inferior de una olla de baño maría. Asegurarse que el agua no toca la olla superior. Llevar el agua a punto de hervir, bajar a fuego y no dejar que llegue a hervir en ningún momento mientras se prepara la salsa. Si llegara a hervir en cualquier momento durante la preparación de la salsa, retirar las ollas del fuego un minuto hasta que enfríe ligeramente y luego regresar al fuego.
Colocar las yemas de huevo, el jugo de limón, la pimienta, el agua en la olla superior y batir ligeramente. Agregar la mantequilla derretida gradualmente (1 a 2 cucharadas por vez) a las yemas mientras se bate. La salsa irá obteniendo una consistencia más espesa. Si espesa mucho agregarle 1 a 2 cucharaditas de agua caliente. Continuar batiendo hasta que toda la mantequilla haya sido incorporada. Sazonar y tapar la olla para mantenerla caliente. Esta salsa no se debe recalentar porque se puede cortar. Si la salsa se cortara, colocarla nuevamente al fuego y agregar 1 cucharada de agua fría mientras se bate vigorosamente.