Picar la cebolla en juliana. Calentar la mantequilla en una olla y saltar la cebolla hasta que esté tierna. Incorporar la centolla, sazonar con sal y pimienta. Agregar la crema de leche, el puré de tomate y el ketchup. Mezclar y cocinar a fuego lento durante 7 minutos.
Si la salsa queda demasiado suelta, se puede espesar agregando 1/2 cucharadita de harina disuelta en 4 cucharadas de agua. Hervir unos minutos, moviendo constantemente.
Servir con arroz blanco y espolvorear con queso rallado.